CÓMO SE HACE UNA UNIDAD DIDÁCTICA

 

Por: Héctor B. Ocampo V.

 

Para comenzar es importante tener en cuenta que el estilo de “hacer las cosas” de cada persona, puede ser diferente, hay quienes prefieren seguir un procedimiento sistemático y ascendente, quienes prefieren empezar al revés otros inician por la mitad, hay quien prefiere no conocer el plan de temas y subtemas hasta que ha terminado, otros prefieren estar bien informados.

 

Pero una Unidad Didáctica requiere que partamos del principio de que todas las personas son procedimentales y seguidoras rigurosas de un orden establecido, pero debemos además diseñarla de tal manera que pueda ser utilizada de diferentes maneras, con diferentes estilos cognoscitivos o estilos de aprendizaje.

 

En la unidad anterior hemos mencionado un orden en el que deben aparecer los elementos de una Unidad Didáctica, vamos a repetirlo a continuación:

 

1-     Presentación

2-  Introducción y orientaciones para el estudio

3-  Objetivos

4-  Esquema

5-  Desarrollo de los contenidos

6-  Resumen

7-  Bibliografía

8-  Ejercicios de autocomprobación

9-  Solución a los ejercicios

10-                     Actividades complementarias optativas

 

Es posible que la persona que va a diseñar la Unidad tenga las ideas tan claras que pueda empezar por el primer punto, y vaya elaborando su unidad en estricto y perfecto orden hasta llegar al punto 10, como lo digo, es POSIBLE, pero ¿ocurre en realidad? Pues en la mayoría de los casos no ocurre así, si una persona inicia con el título, al momento de terminar la elaboración las cosas han cambiado tanto, ha ido y venido tantas veces, que es posible que el primer título que utilizó, no corresponda con lo que la unidad didáctica es en realidad.

 

Por esto, para evitar algunos esfuerzos innecesarios, vamos a orientar desde aquí la elaboración en un orden que puede ser más coherente de acuerdo con los antecedentes del quehacer profesoral en nuestras latitudes y con nuestras actividades universitarias cotidianas.

 

En primer lugar, y partiendo de nuestra realidad, es un hecho que los docentes actuales aún damos una importancia fundamental a los contenidos, y que lo primero que debemos plantearnos es el tema y los subtemas que vamos a desarrollar, o sea que lo primero que elaboraremos es el punto 4 de nuestra U.D., o sea el ESQUEMA.

 

Es frecuente que para esto, recurramos al índice de nuestro “librito joya” editado hace muchos años, en el cual aprendimos los rudimentos y que consideramos lo máximo...mis respetos profesor, pero ese texto puede no ser actual. La recomendación es partir de ese índice, pero consultar otros textos sobre el mismo tema y establecer un plan  que muy seguramente no existe en ningún texto, que es una simbiosis hecha por Usted, y que comienza a darle un toque de originalidad a su U.D.

 

Después de tener el esquema, y ya que somos conocedores del área en la cual trabajamos, formularemos los objetivos de la unidad, que como se ha dicho en la lección anterior, debe hacerse a la manera clásica. Se trata entonces de formular “objetivos de instrucción” que contengan de manera ideal conductas objetivables, claramente descriptibles y medibles.

 

En este momento Ud. se estará preguntando en dónde está lo novedoso de esto, si la moda de los objetivos pasó hace más de veinte años, y tiene razón. Pero lo curioso de esto radica en que los objetivos de los años 70 se formulaban para ser conocidos por los administradores de la educación, el estudiante era el ultimo en enterarse...si se enteraba. Ahora el estudiante y su proceso de aprender son el centro de nuestra actividad, y es a él a quien debemos decirle con toda la claridad posible lo que pretendemos que haga. Esto cobra mas importancia en el caso del aprendizaje mediado, ya que el estudiante, que está trabajando de manera autónoma, puede perder con mayor facilidad el Norte, y centrar sus esfuerzos en aspectos o conductas que no son las que en realidad debe enfatizar para desarrollar las competencias que queremos que desarrolle.

 

De todos modos, el objetivo general puede formularse de una manera mas amplia, mas genérica, y los objetivos específicos mientras mas puntuales y exactos, mucho mejor.

 

Después de tener estos elementos elaborados, podemos pasar a redactar los contenidos.